viernes, septiembre 25, 2009

El universo gráfico de Iris Pérez se presenta delimitado por trazos esquematizados que refieren al ser humano, a la vivienda, a las interrelaciones ente ambos, a la soledad y a la incomunicación. De ahí que las figurillas que constituyen los principales personajes de estas obras nos parezcan caricaturas de seres humanos –acaso las condiciones infrahumanas donde se desenvuelven la mayoría de los habitantes de nuestras ciudades los transforman en caricaturas que pierden humanidad- con sus cabezas enormes y extremidades delgaduchas, seres que afloran sin descanso de un pulso privilegiado y en ejercicio constante. Mujeres y niñas que se buscan, que se encuentran, que se asocian en trilogías, se multiplican en multitudes silentes o se aíslan guarecidas entre muros incomunicados. Un canto a la soledad o un grito desesperado que clama por calidad de vida para toda la sociedad...
El pincel y la tinta no le son ajenos y la capacidad de componer con el trazo nos sorprende en su facilidad, acaso una condición que Pérez debe manejar con extremo cuidado. El papel es su cómplice para lograr estos trabajos que, lejos de ser simplemente esbozos para piezas que tendrán forma en otros medios, se definen con una rigurosidad y coherencia que les permiten transmitirnos las angustias, los decires y las inquietudes de esta artista cuyo discurso gráfico nos la presenta comprometida con su género, con la sociedad y con los indefensos.

Y es pensando precisamente en los indefensos –en esta oportunidad se trata de los pacientes del área infantil del Instituto de Oncología Dr. Heriberto Pieter de Santo Domingo con quienes también desarrollará jornadas de creatividad infantil- que ha decidido donar los beneficios
económicos que resulten de esta muestra para el fortalecimiento de los programas de salud de dicho hospital infantil. Generosa y sensible, así se nos presenta Iris Pérez con sus Obras sobre papel y Carpetas de amor.



Myrna Guerrero
Miembro de ADCA/AICA
Octubre de 2006